jueves, 13 de junio de 2013

Como manejar el radio pasillo en el trabajo



Los que piensen que en las oficinas por ser un ambiente laboral no hay chismes, sin duda alguna jamás han tenido un trabajo por suficiente tiempo para comprobarlo por sí mismos. Es cierto, en un ambiente de trabajo con personas profesionales y maduras, esto es algo que no debería ocurrir, pero igual que los que se desempeñan son profesionales y maduros, son personas con sus pequeñas manías que se convierten en un ambiente competitivo en una forma de atacar a los que piensan, no cumplen con el trabajo como ellos, progresan más rápido, o son más simpáticos, o quizá hasta se llevan mejor con compañeros y supervisores, los celos y la envidia imperan en todo lugar.



Y con todo esto encontrados ya en la situación, de poco sirve de consuelo pensar que es algo normal o creer que puede terminar como llegó, sin importancia. Los chismes pueden hacer gran daño a nivel profesional y personal. Los expertos en entornos laborales efectivos, le encuentran a esta actividad algunos beneficios, como liberar el estrés, externar saludablemente los celos, o una curiosidad natural por lo que alguien más hace, o piensa. Aunque pudiera parecer halagador a nadie le gusta ser objeto de chismes. Así que unos consejos para lidiar con los chismes de oficina, que le eviten el sentirse agobiado por ellos.

No les de demasiada importancia, porque de ser así se convierten en otro problema laboral, aleja la concentración y crea antagonismo en quienes deben trabajar en armonía en el mismo lugar. Antes de enfadarse piense que, esos chismes no deben alejarle de la concentración en su trabajo y que parte de dejarlos de lado es no afectarse demasiado por ellos.



Aclare todo lo que se pueda aclarar, 
aunque usted no tenga más que darle explicaciones a su supervisor sobre su trabajo, es bueno hacerle ver a la gente de manera disimulada qué es lo que usted hace, y cuáles son sus funciones, no querría que si tiene que ocuparse de escoger las noticias importantes en el diario para su jefe, piensen que es un aprovechado que lee en el trabajo sin importarle que los demás sí trabajan.

No comparta secretos con ninguno, el entorno ideal es aquel en que se lleva bien con sus compañeros pero lo limita a una armoniosa relación laboral, cuando se sobrepasa el límite los chismes están a la vuelta de la esquina, porque sí usted confía sus secretos a alguien más tenga por seguro que pronto se sorprenderá cruelmente de que no es tan secreto. No reciba confidencias, no comparta confidencias ni suyas, ni de su jefe, ni de lo delicado de su trabajo.
Socave las bases de los eternos chismosos de oficina, realmente llegado a un trabajo y sobretodo luego de un tiempo en el mismo uno sabe quién es chismoso y quién no, pero iniciar una batalla lejos de ser bueno hará complicado el asunto. Sea amable con los que tienen la cualidad de chismear y felicitelos su cumpleaños, cuando se ausentan interesese por su salud y sea la persona amable que ellos quieren ver, cuando se propogan chismear sobre usted, es seguro que se lo pensarán, después de todo usted ha sido muy amable.


Pero si aún asi chismean, y su actitud no ha logrado hacerle escapar del asunto, es hora de tomar las riendas del asunto, hable claramente con la persona que esté vinculada a los chismes, si es un chisme que socava su integridad y su trabajo puede hablarle primero y si no cambia de actitud informar a su supervisor. No pierda el control pero reclame aquello a lo que usted tiene derecho, su derecho a no ser objeto de chismes.

¿QUE PASA CUANDO EL CHISME SE TRANSFORMA EN ACOSO Y TRASCIENDE LAS PAREDES DE LA ORGANIZACIÓN?

El Ciberacoso (también llamado cyberbullying por su traducción al inglés) es el uso de información electrónica y medios de comunicación tales como redes sociales, blogs, mensajería instantánea, mensajes de texto, teléfonos móviles y websites difamatorios para acosar a un individuo o grupo, mediante ataques personales o inventando historias inexistentes. 

Puede constituir un delito penal aunque en Argentina, en este y otros sentidos, las leyes están todavía en pañales (y dan mal olor, pero nuestros legisladores están más interesados en otras cosas), permitiendo así que cualquier persona mal intencionada, inclusive con intensiones de cobrar algún dinero para cesar el Ciberacoso utilice estas técnicas en contra de cualquiera de nosotros (recordemos el caso de Florencia Peña, que se le pedía dinero para cesar las publicaciones).

El ciberacoso no es accidental,  e implica un daño recurrente y repetitivo infligido a través de los medios electrónicos. Según R.B. Standler el acoso pretende causar angustia emocional, preocupación, o inclusive un severo daño económico, social y familiar al injuriado. 

El ciberacoso puede también incluir amenazas, connotaciones sexuales, etiquetas peyorativas (p.ej., discurso del odio).
El término ciberacoso fue usado por primera vez por el educador canadiense Bill Belsey. Otros términos para ciberacoso son "acoso electrónico," "e-acoso," "acoso sms", "network mobbing", "acoso móvil" "acoso en línea", "acoso digital", "acoso por internet", "acoso en internet" o "internet acoso".

Procedimiento del acosador

La mayoría de los modelos explicativos del comportamiento psicopático del acosador tienen en común la presencia en la raíz de su patología de profundos y ocultados sentimientos de inadecuación personal y profesional procedentes de diferentes causas. Esos sentimientos, conocidos como vulgarmente <<complejo de inferioridad>>, son reprimidos en lo profundo del inconsciente y hacen que el acosador reaccione de manera violenta contra todo lo que pueda recordárselos o sugerírselos. 

La solución del hostigador consiste en lugar de elevar sus propios niveles de autoestima, en rebajar los de los demás hasta lograr dejarlos por debajo de los suyos. Con ello obtiene la compensación de quedar por encima de ellos mediante la ridiculización, la humillación o la hipercrítica sistemática de todo cuanto hacen o dicen las víctimas. El peor caso es la combinación de estas razones junto al del beneficio económico del acosador.

Los Argentinos somos muy chismosos, y solemos darle mucha importancia a "lo que se dice", dejando de lado muchas veces la fuente de la información que pudiera desmentirlo. Ante la falta de regulación legal en este sentido, en la era de la información y comunicación,  cualquier blog o pagina web replica muchas veces esta información, simplemente para llenar un espacio y cuanto más cruento el titulo, mucho mejor, magnificando así el daño  ocasionado,  otorgándole un poder enorme al difamador o acosador.

Lamentablemente muchas veces festejamos y tomamos en serio lo que "se dice", dandole así cuerpo y alma a esos dichos.  Lo que realmente estamos haciendo es otorgarle un poder enorme e ilegitimo al ciberacosador o mafioso de estos medios, que tarde o temprano se nos volverá en nuestra contra, en contra de nuestra empresa, carrera profesional o de nuestros hijos.



Pareciera ser demasiado fácil que alguien se apodere de 15 años de trayectoria profesional intachable, de nuestra carrera universitaria que con tanto esfuerzo obtuvimos, o de nuestra vida social, publicando simplemente basura en la web, pero sí, es así. 

Es importante que sepamos que los adolescentes son más permeables a este tipo de daños, que en muchos casos, y ante la imposibilidad de manejarlo, pueden llegar al suicidio por la angustia y depresión. 

Para los más deprimidos, les dedico este video imperdible.



Arriba!!!

Publicado por Federico Wasinger

1 comentario:

  1. jajajajaj, estas mujeres siempre igual, haciendo quilombo por todos lados, gracias por compartir Federico Wasinger

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